Desde el 6 de Octubre que nos vimos por primera vez no nos hemos alejado casi ningún día, salvo por un par de fines de semana que tenido que viajar al sur y como dos que ha tenido turno. Todo es tan perfecto hasta ahora...
Igual me da un poco de lata, porque siento que le tengo cariño, pero me da lata decírselo tan rápido o que no sienta lo mismo. De todas formas, dicen por ahí que el cariño se demuestra con hechos y eso lo hace con creces. Por ejemplo, ahora figuro viajando y me mandó unas galletas cocinadas por él y leche para el camino (antes me había cocinado para que no tuviera hambre)... cómo no quererlo?
Igual termino hace 4 meses una relación de años y quizás a eso se deba su desconfianza. El otro día hablamos acerca de nosotros y le planteé que yo era su “nada”, para ver si llegábamos a algún puerto, pero no quiso hablar del tema. Igual me dio lata, porque me dejó medio consternado, porque no sé qué onda.
Hace unos días, después de haber tomado, lo abracé fuerte y le dije “ay, guaguito mío, te quiero”, igual escucho la última frase y por lo que me fijé le gustó.
No quiero ser el primero en decir te quiero, pero al mismo tiempo tengo ganas de que las cosas se estabilicen más. Qué difícil esa parte de los inicios... el tiempo dirá, mientras tanto habrá que disfrutar del momento.
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